Trabajo Colaborativo, un imperativo en la era digital
12 junio, 2019
Durante las últimas décadas, el trabajo colaborativo viene adquiriendo una mayor importancia en las empresas y organizaciones. Sobretodo aquellas que buscan mejores resultados y una mejor posición competitiva en el mercado en que participan. La razón es simple, el desempeño colectivo bien orientado, es superior a la suma de los desempeños individuales. Y genera resultados superiores.
Colaboración en la era digital
En la Economía digital, la promoción del trabajo colaborativo adquiere una relevancia superior y se manifiesta en dos formas claramente definidas: La generación de un Sistema de Trabajo Colaborativo y una Cultura de Colaboración, que se complementan la una con la otra.
El sistema de trabajo Colaborativo se hace presente a través de la integración de tecnología en el quehacer laboral. Donde cada individuo colabora y aporta al logro colectivo, a través de un dispositivo digital. Ya sea en su lugar de trabajo o a distancia. Más si nos quedamos solo en esta forma, estos individuos forman parte de una máquina de eficiencia y productividad. Por lo que esto resuelve solo la parte racional del trabajo colaborativo.
Complementariamente, la construcción de una cultura de colaboración, busca el desarrollo integral del potencial de colaboración de las personas, atendiendo su lado emocional. Proporcionando los estímulos necesarios para que cada persona pueda entregar lo mejor de sí en el desempeño de su trabajo.
¿Cómo se promueve la colaboración?
Empresas como Google, además de proporcionar a los empleados los sistemas de trabajo colaborativo, se preocupan de desarrollar un entorno laboral donde las personas se sientan valoradas, reconocidas, recompensadas y realizadas con lo que hacen.
Veamos algunas ideas de cómo llevar a la práctica esta cultura de colaboración:
- El entorno físico de trabajo, los espacios comunes son diseñados para que las personas se encuentren, conversen, se conozcan, se conecten unos con otros, como una forma de balancear el trabajo solitario e individual.
- La transparencia de la información, les proporciona a las personas acceso prácticamente ilimitado a la información de la empresa lo que les permite agilizar su trabajo, además de ser depositarios de una plena confianza en el cuidado de información confidencial. Esto apalanca fuertemente el sentido de pertenencia.
- La formación de equipos de trabajo alrededor de proyectos y tiempo para desarrollar sus propios proyectos e iniciativas, desafía las capacidades individuales y les proporciona una alta exposición frente a los líderes de la empresa.
- Los líderes y gerentes promueven espacios de conversación y retroalimentación. La conversación sigue siendo la forma más valiosa e importante de comunicación en las organizaciones.
Buenas prácticas como estas y muchas otras que no están aquí mencionadas, permiten construir un cultura que promueva la colaboración. La que junto a los sistemas de trabajo colaborativo, aumentan las probabilidades de éxito en los negocios y se constituyen en una ventaja competitiva de la empresa.